Empresas con energía fotovoltaica solar

Aunque la energía fotovoltaica solar es una alternativa económica y disponible está en manos de pocas empresas en el territorio español. Por lo que la Asociación Nacional de Productores de Energía Fotovoltaica, Anpier critica abiertamente a las macroempresas por dos cosas principalmente:

• La monopolización de la propiedad, dejando de lado el modelo descentralizado.
• La falta de apoyo a las iniciativas locales.

Da alerta a los riesgos de la gran concentración de la propiedad de instalaciones fotovoltaicas. Las cuales están destinadas al suministro de energía eléctrica.

Anpier señala la forma en que puede perderse la única oportunidad de redistribución de la riqueza solar. Lo cual podría ocurrir si no se regula el acceso a la red general para darle acceso a las iniciativas locales. Lo que está dando pie a la concentración y monopolización de la propiedad, y que deben modificarse desde el sistema de subastas en las próximas convocatorias.

El sector que aporta la principal magnitud es la mitad sur de España por el que se reciben más de 3.000 horas de radiación al año.

Pero, los beneficios solares de esta generación fotovoltaica están siendo monopolizados por un reducido grupo empresarial. Debido a una arcaica normativa que propicia la concentración de macroparques en condiciones que las pymes no tienen acceso.

Incluso las iniciativas locales tienen acceso restringido a los puntos de evacuación, para lo cual debe haber una mejor regulación según Anpier.

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Inversores, principales beneficiarios

El vocero de la asociación señalada indica que, una vez construidas las instalaciones su rango de empleo es menor que la generación de parques fotovoltaicos más pequeños.

Así, los principales benefactores son los inversores que percibirán rápidamente sus retornos. Estos ingresos serán exclusivos de aquellos ciudadanos que tengan acceso a estos desarrollos y a la oferta de empleo local.

No obstante, los las pymes, las que tienen la capacidad de generar empleo, aportando valor al territorio

De los 3.000 megavatios fotovoltaicos de la subasta mas reciente, el 90% fue repartido en menos de 30 empresas. Indicando que un 25% aproximado ya se encuentra en fondos internacionales.

No es sólo eso, sino que más del 60% de los 8.000 megavatios que están proyectados fuera de subasta en construcción; ya pertenece a grandes empresas. Concentrando los beneficios y muchos de los cuales también se encuentran en fondos internacionales.

Proyecciones en una década

La asociación estima que el suministro de energía fotovoltaica provistas en instalación para la década próxima será de 20.000 MW. Los que representarán 34.440 millones de euros, durante su vida útil.

La concentración de propiedad y la misma producción también sucederá con el parque eólico

Fuera de España

La situación en otros países es muy diferente, según un estudio que la Consultora Haz Energía realizó para Anpier. Alemania, Reino Unido, Italia y Francia representan más de las tres cuartas partes de la potencia fotovoltaica europea. Los cuales han distribuido la generación de instalaciones en pequeño consumo por el apoyo de las gestiones de autoconsumo.

Cabe destacar a Alemania en cuyo territorio más de la mitad de la potencia fotovoltaica está destinada a proyectos inferiores a los 40kW. Siendo un ejemplo representativo de impulso a la pequeña empresa.

En el Reino Unido, de todas las instalaciones fotovoltaicas el 99,5% corresponden a sistemas de baja potencia. Muchos de los cuales, no superan los 50kW. Y en Francia el 98% corresponde a potencias inferiores a los 100 kW.

En Italia, el 90% de las instalaciones son de potencia inferior a los 20 kW. Por lo que las grandes instalaciones son excepcionales.

Democratizar la energía fotovoltaica

Anpier considera que, en estos países, han entendido que la energía solar debe estar al alcance de todos. Pero que en España el modelo adquirido hace diez años ha sido un error.

Desde el 2007 hasta el 2010, los 4.000 MW instalados se socializaron repartiéndose en 60.000 titulares. Por lo que los ingresos de capitalizaron a pymes, autónomos y familias.

Martínez-Aroca de Anpier, indica que este modelo, ha relegado al ciudadano que solo puede resignarse a ser un mero consumidor. Cuando en realidad podría ser productor de energía.

Las restricciones técnicas normativas y los cambios retroactivos que soportan están 60.000 familias acreedoras; son formas de mantener a los pequeños propietarios al margen sin poder acceder a la producción.

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